This is why we play.
Pues nada, así de simple. Creo que en la mesa de Potionless jugamos re-bonito. A una semana de haber tenido el Enrolate, el tema sobre la mesa ha sido el valor agregado del juego, no precisamente hacia la comunidad, sino hacia los jugadores mismos.
Hablamos sobre la esencia del juego, no solo entre nosotros, también con personas totalmente ajenas al tema, al grado de nunca haber escuchado sobre D&D (imaginenme explicando de que va esto de los juegos de rol a mi pareja). Qué es lo que verdaderamente nos mantiene jugando.?
Quetzal se encontró un videito bastante interesante, de una reseña de una mesa de juego de esas de famosos (estamos trabajando en nuestro juego en vivo). La conclusión es muy acertada, las relaciones que se forjan en la mesa, son extremadamente fuertes y duraderas. El juego nos puede llevar a crear lazos emocionales con los compañeros de juego, se pueden vivir cosas tan intensas, que lo convierte en una experiencia increíble.
Vives por y para tus compañeros de armas, mueres por ellos, luchas hasta el final con ellos. Parece que es solo un juego, pero cuando el apocalipsis zombie nos alcance, es con ellos con quienes quieres sobrevivir. Bueno, no necesariamente un apocalipsis, pero por lo menos si llegar vivo y sano a la siguiente semana. (así es, nos vemos cada jueves para saber que estamos bien , y despotricar en contra de la mala vibra que nos rodea).
Entre muchas de las cualidades que tiene este juego, anclarse narrativa y emocionalmente en una historia que se desarrolla entre todos, es extremadamente satisfactorio.
Solo por si se lo preguntan, lo que está pasando justamente en este momento arriba en la tira, es parte de esta construcción colectiva y de cómo los personajes y jugadores se conectan. Algo muy marcado en este juego de La Ronda, es como todos nosotros como jugadores entramos en una narrativa colectiva donde incluso parece que visualmente vemos lo mismo, de igual manera, sentimos el mismo miedo, el mismo suspenso y sufrimos del mismo horror al enfrentarnos a un lúgubre y desdichado mundo, en que la oscuridad llena cada espacio disponible y el peligro está a la vuelta de cada esquina.
A un paso de la victoria y la muerte…