Como comente en mi última participación, nuestra siguiente parada en el agenda rockera era con los locales Lorelle Meets The Obsolete, el 26 de Abril.

Honestamente, no recuerdo quien trajo a la mesa que estarían en el Foro Independencia, pero me pareció una gran oportunidad de por fin verlos en vivo. Debo admitir que, con todo y que son originarios de Guadalajara, y que llevan activos desde el 2011, jamas me había tocado verlos. De hecho, la primer ocasión que escuche de ellos fue por parte de mi pareja, hace ya varios años, quien me comentó que los había visto de rebote en el Palíndromo, y que a diferencia de muchos actos locales, le habían gustado bastante, agregando que a mi me gustarían también, por lo cual me di a la tarea de buscar material de ellos y di con Corruptible Faces. Al poco tiempo sacaron Chambers.

Después de eso, hace ya unos años también, Jonas y Mario me comentaron que los vieron en el Laboratorio Sensorial y que les voló la tapa del seso. Hace no tanto, previo a esta presentación, estoy casi seguro de haber leído en algún lado: “Son la mejor banda de México en la actualidad”, lo cual creo que por superlativo que suene, al menos merece indagar si es cierto o no. Así que como he tratado de instituir durante el año en curso, motive a la pandilla a lanzarnos. Chamuco declinó dado que tenía jale atrasado, así que no nos acompañaría esta ocasión. Pero, Niño y Mario de Los Vagos se rifaron a asistir con nosotros, incluso poniendo el transporte. Mientras íbamos en camino, Mario comentó que ojalá alcanzáramos a ver a PHI.

Yo desconocía de esta banda, pero cuando entramos ya estaban echando ruido. Sin expectativa alguna, fuimos por unas birras y nos acomodamos para escuchar. Grata fue nuestra sorpresa colectiva, dado que PHI nos envolvió por completo con su drone experimental. Digno de destacar es el ensamblado de la instrumentación, el cual incluye sintetizadores, un fagot, percusiones adicionales a batería e instrumentos autóctonos como cuencos tibetanos, un muchang y flauta, además de la guitarra acústica la cual parece que dicta la batuta de la narrativa sonora.

Siendo sincero, no se cuanto fue que tocaron, podría decir entre 30 o 40 minutos, dentro de los cuales hubo varios momentos de escalofríos. Rara vez una banda me cautiva sin conocerla, pero estos chaves de Tonalá definitivamente se ganaron en mi un nuevo fan, junto con el resto de mis cuates. Salimos al patio a refrescarnos con el sereno nocturno y a fumar. Oswaldo y Quetzal andaban un tanto agotados de una semana tupida de chingaderas, por lo tanto nos ubicamos una mesa y nos sentamos a cotorrear un rato.

De repente, arrancó la siguiente banda. Fue mayor el cansancio que las ganas y nos quedamos afuera. Llamó nuestra atención que no fuimos los únicos en quedarnos afuera, y que conforme avanzaba el set de la banda en curso, más y más gente comenzó a regresar al patio. Me dio morbo el porqué de esto y me pase a ver a los chavos en escenario. Entiendo sin duda el porque: esta banda no sonaba bien. Créanme, se apreciar un buen noise, más si le meten krautrock, a la NEU!/CAN/Tangerine Dream, pero cuando no está hecho con las patas. Esto sonaba como a ensayo de novatos en casa del centro. Si la producción hubiera estado a mi cargo, estos morros habrían abierto, PHI segundo, LMTO cerrando. Su disgusto fue notorio y terminaron su set en alrededor de 20 minutos, para las 20 personas que conté adentro viéndolos, seguro amigos de la banda o algún intelectual de banqueta.

Fuimos por otra ronda anticipando que ahora si venia lo mero bueno. En preparación a esta crónica, revisite sus discos anteriores, pero también le di una vuelta a su más reciente, titulado De Facto. De este material desprendieron 6 pistas, entre ellos el corte inicial y creo que segundo sencillo titulado como mi madre, Ana. De aquí, nos dieron un paseo fenomenal de psicodelia/shoegaze/space rock en lo que yo estimaría fueron el menos 60 minutos, intercalando De Facto con composiciones de sus trabajos anteriores. Creo que lo que mas disfrute fue el cierre del set, con un reacomodo bastante coherente conformado por Unificado, Resistir, La Maga (mi nuevo track favorito de ellos) cerrando con su primer sencillo Lineas en Hojas.

Regresaron para una más, dejando caer un corte para conocedores de su primer disco, el cual fue notorio fue bien recibido por sus seguidores. Me da vergüenza no ser su fan desde que iniciaron. Correspondiente a mi comentario anterior de que son la mejor banda de Mexico, no soy nadie para decir si lo son o no. Lo que sí puedo decirles, es que en 8 años de carrera, han visitado múltiples países para foros y festivales chingones. Han compartido escenarios con tus bandas favoritas. Son reconocidos a nivel internacional y definitivamente son un excelente representante de la escena nacional. Estoy completamente satisfecho con lo que vi y definitivamente repetiré la experiencia cuando sepa que están por el rumbo de nuevo.

Una vez finalizado el evento, Niño nos reveló que se perdió más de la mitad del show por salirse a tener un diálogo abierto sobre la pobre ética profesional de cobrar un servicio al 100% de manera anticipada con un viene-viene, por $50 pesos que nos vacunaron al estacionarnos, cuando ni siquiera era su carro.

PD – ya estamos planeando la próxima sesión de La Ronda, esperamos poder contarles al menos una crónica de viaje, u otros pormenores cómicos de una salida de la ciudad.